Hace aproximadamente unos seis a siete años atrás no recuerdo exactamente cuando ni como. Era una noche más. Bueno, eso lo pensaba al recostar mi mente cansada luego de mi acostumbrado día laboral. Si recuerdo bastante bien que yo (en mi sueño) estaba sentada en un tronco seco bastante abulto eso dentro de una pradera gigantesca, verde como esmeralda. Realmente era un sueño a puesto que cercano al tronco que yo reposaba habían bellas flores en su mayoría de color amarillas. Era todo tan bello en verdad, también aleteaban mariposas pequeñas y eran también de color amarillo anaranjado. Deslizaban de un lado para otro. Me sentía tan feliz, me sentía tan apacigüe.
De entre tanto, mi corazón palpitó como nunca. Como si este saliera de mi boca. Cuando en mis ojos se dibujó una figura tan esbelta, este era tan perfecto. Así como siempre quise. Medía como 1,90 cm, piel blanca, vestía un conjunto de jeans de esos pre-lavado. Su rostro casi celestial, la sonrisa enorme y una dentadura más que deslumbrante... sin olvidar la barbilla que le quedaba tan perfecta. Y para sorpresa mía este hombre tan divino corrió a mis brazos. Si era sorprendente era como si de un minuto a otro pasé de esa sensación extraña de no entender que sucedía a esa sensación de que estaba tan feliz por ver a este a quien yo esperaba.
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| "Sos mi sueño o un Deja Vú" |
Para completar mi sorpresa, lo recibo con un beso. Oh Dios..!! Era el momento más feliz de mi vida.
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